Su carrera deportiva, se extendió durante más de veinte años, comenzó en el rallycross, donde primero condujo Minis y posteriormente un Metro. Obtuvo un éxito considerable en el rallycross, ganando varios títulos. Alrededor de 1985, se pasó al circuito, uniéndose al Historic Sports Car Club. Durante los cinco años siguientes, Cooper sería una de las figuras más destacadas de esa serie; su Lotus Elan verde y amarillo fue una presencia constante en las pruebas de carreras de carretera del HSCC, a menudo compitiendo con los AC Cobras y los TVR Griffiths en cabeza de carrera.

Sus actuaciones continuaron durante la temporada de 1990; compitiendo en la categoría de Carreras Mejoradas, realizó una exhibición particularmente impresionante en Mallory Park, donde venció a los más potentes TVR y AC Cobras para alzarse con la victoria general. Fuera del mundo de las carreras, Phil era un jugador de críquet entusiasta y competente. En el mundo empresarial, comenzó como vendedor de coches y ascendió hasta ser propietario de un taller mecánico en Loughborough, Leicestershire.

Sufrió un accidente mortal durante una sesión de pruebas privadas en Silverstone. Conducía un Lotus Elan S1. Sus compañeros de la categoría Improved Road Sports, que hasta entonces lideraba la categoría, no perdiera puntos al final de la temporada. Y asi fue coronado campeón póstumo de 1990.