Michèle Mouton - MICHÈLE MOUTON... UNA HISTORIA SIMPLE... -
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MICHÈLE MOUTON... UNA HISTORIA SIMPLE...
Una niña se encuentra con un chico, el chico le pregunta a la chica por una cita... Él la lleva a un Rallye... El padre de la niña no le gusta el chico.
Entonces éste le compra a la niña un coche de carreras y le dice que vaya a competir por su cuenta. La chica conquista el mundo de los Rallyes.
La chica se llamaba Michéle Mouton y hasta ese momento ella era bastante normal. Quizá no sea por el hecho de que comenzó a conducir el Citroën 2CV de su padre en la Riviera francesa cuando tenía catorce años.

En 1972, conoció a un joven piloto italiano Jean Taibi y la invitó al Tour de Corse. Esta vez, ella solo era una espectadora. Pero solo unos pocos meses después, en enero de 1973, compitió con él en el famoso Rallye Automobile de Monte-Carlo como copiloto.

UNA NIÑA VA DE RALLY...
Al padre de Michéle le gustó la idea de que su hija participara en esta clase de eventos, ya que él mismo deseaba convertirse en un famoso conductor. Pero no le gustaba Taibi, a quien consideraba demasiado arrogante, y especialmente no le gustaba el coche con el que iba.
Un día le dijo a su hija: "Si quieres seguir compitiendo, tienes que convertirte en un conductor. Te compraré un automóvil y pagaré una temporada para que puedas demostrar lo que puedes hacer ".
El resto, como ellos dicen, es historia...

El Sr. Mouton se llevó los ahorros de la familia y le compró un nuevo y brillante Alpine A110, una elección popular de los conductores de rally en ese momento. Incluso formó un equipo de carreras, formado por amigos y vecinos, y lo llamó Groupe Compétition Grasse. La estrella de Michèle comenzaba a brillar intensamente.

La primera temporada, 1973, fue el momento de encontrar su camino en el rally, pero ya se mostró como una gran promesa: terminó octava en el evento femenino en el Tour de Corse.

En 1974, ya competía en los eventos propios del Campeonato Mundial de Rally, ocupó el 12° lugar de la general en su amado Tour de Corse y se convirtió en la campeona francesa y europea de damas.

El año siguiente, 1975, fue grande. La petrolera francesa Elf reconoció su talento y le ofreció un patrocinio, finalmente moviendo a Michele al mundo del rally profesional. Obtuvo la primera de muchas ofertas para probar las carreras de circuitos: como parte del equipo femenino, llevó el prototipo Moynet LM75 Le Mans al primer lugar de su clase en las 24h LeMans. "Empezó a llover, y recuerdo que comencé a pasar a todos. Estaba corriendo en slicks. En los boxes, decían "Michéle, debes parar", pero no quería porque estaba pasando a todos ".

El siguiente gran cambio en la carrera de Michèle se produjo en 1977, cuando firmó con Fiat para conducir su 131 Abarth, una bestia de automóvil que, según sus propias palabras, "manejó como un camión grande, no como un automóvil". Incluso con un coche tan bruto, logró grandes resultados, incluso ganando el rallye del Tour de Francia. Sin embargo, antes del rally de Monte-Carlo del próximo año, llegaron malas noticias desde Turín. Solo podían soportar cinco autos y no quedaba lugar para Mouton. Tuvo que pedir prestado un Lancia Stratos que normalmente conducía Bernard Darniche, uno de los conductores de Fiat. De modo que a Michéle le resultaría familiar, Darniche estaba furioso porque una mujer arruinara su automóvil. Terminó séptima, el mejor lugar de todos los Lancias en competición. Y Darniche probablemente recordó sus palabras con amargura en septiembre, cuando Mouton peleó con él por primera vez, hasta que arruinó su Lancia Stratos, sobrecalentando el motor.

AÑO CON "QUATTRO"
Entonces, vino una llamada telefónica. El jefe del equipo de trabajo de Audi le ofrece un contrato para la próxima temporada en su nuevo Quattro. La bestia de 300 caballos de fuerza con tracción a las cuatro ruedas, algo que no se había visto jamás antes en el mundo del rally. Firmó para un año y con otro comentario chovinista para que Michele se convirtiera en pionera también. Después de que el legendario piloto de rallyes Ari Vatanen dijera en 1981:
"Nunca puedo ni voy a perder con una mujer"... Michèle ganó su primer evento WRC en Sanremo, convirtiéndose en la primera mujer, (y única), en conseguir ganar una prueba del Mundial de Rallyes. 1982 fue duro para Mouton.
Durante el rally Costa de Marfil, supo que su padre murió, pero mantuvo su último deseo de seguir en competición y hacer todo lo posible. Y si no hubiera sido por un choque a 600 km antes del final de la prueba, podría haber ganado, lo que abriría su camino al campeonato del Mundo de pilotos. Ese año habia ganado tres pruebas del calendario, Portugal, Acrópolis y Brasil, también sentada al volante del Quattro en dura pugna con Walter Rohrl y su opel Ascona. Al final, Walter Röhrl ganó y se convirtió en el primer piloto del WRC en ganar dos títulos consecutivos.

LOS MONSTRUOS VIENEN...
A partir de 1983, el Grupo B se convirtió en la parte más loca y legendaria de la historia del WRC. Las reglas de homologación perdidas trajeron niveles locos de potencia, (en exceso de 400 Y 500 CV), y una velocidad sin precedentes hasta ese momento. Como dijo Juha Kankkunen: "WRC es para niños, Grupo B era para hombres". Y... una mujer, debemos agregar. Detrás del volante de los monstruosos Quattros, se convirtió en una de las pocas personas capaces de controlar el automóvil a velocidades increíbles entre multitudes de fanáticos enloquecidos. Y lo hizo bastante, muy bien, en esta ocasión, también. Sin embargo, no todo se trataba de rallyes. 

En 1984, Mouton llevó un Audi Quattro a Pikes Peak en Colorado, siendo el más rápido de su clase. 
Al año siguiente, 1985, ganó en la general, poniendo fin al reinado de los prototipos V8 estadounidenses. Cuando el legendario piloto estadounidense Al Unser llegó con comentarios machistas, ella respondió:
"¡Si tienes las pelotas, puedes tratar de volver a correr contra mí también!". 

Para 1986, Michele encontró un asiento en el equipo Peugeot, conduciendo el nuevo y aún más rápido Peugeot 205 Turbo16. El pequeño automóvil francés le permitió conquistar el Campeonato Alemán de Rally. Ganadora de seis de los ocho eventos, Mouton se convirtió en la primera mujer en ganar un gran campeonato de rally. Al final, fue una vez más el Tour de Corse lo que lo cambió todo. Después del trágico accidente de Henri Toivonen junto a su copiloto Sergio Cresto, Michele Mouton decidió que si el Grupo B iba a terminar, también se acabaría su carrera en los rallys. Y, como sabemos, así fue... y según dicen, en una ocasión comentó:
"Para conducir bicicletas, me quedo en casa"...
GRANDE MICHÈLE !!!!

Pero no fue el final definitivo de su aventura con los rallyes. Hoy, Michele Mouton es gerente de la FIA en el Campeonato Mundial de Rally, supervisando el mundo que una vez tomó por asalto, una hazaña que ninguna mujer ha repetido desde entonces.

Referente a Pikes Peak 1985... un poco de su vivencia:
Entrevista de Carl McKellar el 8-Junio-2013

Primero, el coche "Era mi coche del mundial de rally, el Audi Sport S1, (también llamado Sport Quattro), de grupo B, (no el de los alerones, el anterior modelo. El de los alerones como muchas veces hemos comentado aquí es el S1 E2 ó E2), con bastantes modificaciones. Trabajamos mucho en el trabajo del motor en altitud y en el sistema eléctrico. Tenía 600 caballos de potencia al freno, solo 70 más que mi coche 'normal' de rally, lo cual no era demasiado. Mi caja de cambios era manual. Era lo que había, así que no tenía más remedio que aceptarlo".
Y después la carrera "Era sobre gravilla suave, al aire libre. Empezabas a 1.500 metros sobre el nivel del mar, en un bosque, y llegabas a alcanzar casi los 4.500 metros en menos de 20 kilómetros. Todo eso en 12 minutos, era como... ¡chiiuuuuun!".

Una vez, conduje con todas esas nubes alrededor y algunos de los conductores que llevaban coches descapotables tenían que ponerse máscaras de oxígeno. A mí, la altitud no me parecía un problema. "En grava, incluso con 1.000 caballos de potencia, el coche puede deslizarse y tienes que tener cuidado. Pero ahora que es todo asfalto... con neumáticos lisos y 875 caballos... lo mejor es desear buena suerte, (en referencia a Sebastien Loeb).
¿Qué me dices de los bajones? "Esto es un desafío. No tienes que venirte abajo... ¡Tienes que seguir en la carretera!.
En la cima, tienes cuatro curvas en las que vas a tope, excepto en la segunda. Yo estaba muy motivada y decidí no dejarme caer. Sentía como si el coche estuviera tirando de mí y pensaba: 'Mierda, voy a llegar hasta ahí'. Te lo digo en serio, te sientes tan cerca de... Tenía ese sentimiento de estar justo ahí, y los sentimientos son muy fuertes, creo".

No te metas con Mouton...
"Los organizadores me hicieron la vida imposible. Era como si fuera la primera vez que veían un coche de rally o un coche con turbo... o la primera vez que vieran a una europea, ¡o a una mujer!". "Me pararon por exceso de velocidad al principio del entrenamiento, por 8 km/h, y me pusieron delante de un pequeño tribunal donde me decían que era como una criminal porque había superado la velocidad permitida y podía haber matado a sus hijos". "Me multaron y me prohibieron empezar la prueba. Yo me hubiera metido, me hubiera puesto los arneses y habría salido. Sabían que no tenía casi tiempo para entrenar y no querían que ganara, así que encontraron algo que creían que impediría que lo hiciera". Yo estaba tan convencida que decía: "Os lo voy a demostrar, incluso en esta situación". "Así que lo pensamos y decidimos decirles que íbamos a hablar con la prensa a la hora del desayuno a la mañana siguiente. Les dije: "Puedo demostraros que incluso a 30 km/h más rápido puedo frenar a tiempo el coche para no atropellar a un niño. Además, ni siquiera estáis pensando en mi propia seguridad cuando esperais que haga una montaña como esta. ¡Estáis locos!". Se dieron cuenta y dijeron: "Ah, la seguridad". Así que al final me permitieron arrancar el coche, aunque los mecánicos tuvieron que empujarme hasta la línea de salida y no podía poner una marcha hasta que empezara a correr el reloj. Yo estaba tan convencida que decía: "Os lo voy a demostrar, incluso en esta situación". ¿Las cuatro curvas de la cima? Las cogí todas a saco. Me hice con un nuevo récord en la carrera, otra victoria y cabreé a algún que otro americano payaso.

En 2000, participó en la carrera London Sydney Marathon, conduciendo un Porsche 911, teniendo como navegante al ganador de la misma carrera en 1993, Francis Tuthill,y acabando detrás de su ex-compañero Stig Blomqvist.

Texto información de www.skoda-motorsport.com, traducido al español, (añadiendo alguna cosita), por MUNDO RALLY RETRO (GrupoB)
La entrevista de la subida Pikes Peak es de Carl McKellar el 8-Junio-2013.
Palabras clave: Historia;Michele_Mouton;Personajes

MICHÈLE MOUTON... UNA HISTORIA SIMPLE...

Una niña se encuentra con un chico, el chico le pregunta a la chica por una cita... Él la lleva a un Rallye... El padre de la niña no le gusta el chico.
Entonces éste le compra a la niña un coche de carreras y le dice que vaya a competir por su cuenta. La chica conquista el mundo de los Rallyes.
La chica se llamaba Michéle Mouton y hasta ese momento ella era bastante normal. Quizá no sea por el hecho de que comenzó a conducir el Citroën 2CV de su padre en la Riviera francesa cuando tenía catorce años.

En 1972, conoció a un joven piloto italiano Jean Taibi y la invitó al Tour de Corse. Esta vez, ella solo era una espectadora. Pero solo unos pocos meses después, en enero de 1973, compitió con él en el famoso Rallye Automobile de Monte-Carlo como copiloto.

UNA NIÑA VA DE RALLY...
Al padre de Michéle le gustó la idea de que su hija participara en esta clase de eventos, ya que él mismo deseaba convertirse en un famoso conductor. Pero no le gustaba Taibi, a quien consideraba demasiado arrogante, y especialmente no le gustaba el coche con el que iba.
Un día le dijo a su hija: "Si quieres seguir compitiendo, tienes que convertirte en un conductor. Te compraré un automóvil y pagaré una temporada para que puedas demostrar lo que puedes hacer ".
El resto, como ellos dicen, es historia...

El Sr. Mouton se llevó los ahorros de la familia y le compró un nuevo y brillante Alpine A110, una elección popular de los conductores de rally en ese momento. Incluso formó un equipo de carreras, formado por amigos y vecinos, y lo llamó Groupe Compétition Grasse. La estrella de Michèle comenzaba a brillar intensamente.

La primera temporada, 1973, fue el momento de encontrar su camino en el rally, pero ya se mostró como una gran promesa: terminó octava en el evento femenino en el Tour de Corse.

En 1974, ya competía en los eventos propios del Campeonato Mundial de Rally, ocupó el 12° lugar de la general en su amado Tour de Corse y se convirtió en la campeona francesa y europea de damas.

El año siguiente, 1975, fue grande. La petrolera francesa Elf reconoció su talento y le ofreció un patrocinio, finalmente moviendo a Michele al mundo del rally profesional. Obtuvo la primera de muchas ofertas para probar las carreras de circuitos: como parte del equipo femenino, llevó el prototipo Moynet LM75 Le Mans al primer lugar de su clase en las 24h LeMans. "Empezó a llover, y recuerdo que comencé a pasar a todos. Estaba corriendo en slicks. En los boxes, decían "Michéle, debes parar", pero no quería porque estaba pasando a todos ".

El siguiente gran cambio en la carrera de Michèle se produjo en 1977, cuando firmó con Fiat para conducir su 131 Abarth, una bestia de automóvil que, según sus propias palabras, "manejó como un camión grande, no como un automóvil". Incluso con un coche tan bruto, logró grandes resultados, incluso ganando el rallye del Tour de Francia. Sin embargo, antes del rally de Monte-Carlo del próximo año, llegaron malas noticias desde Turín. Solo podían soportar cinco autos y no quedaba lugar para Mouton. Tuvo que pedir prestado un Lancia Stratos que normalmente conducía Bernard Darniche, uno de los conductores de Fiat. De modo que a Michéle le resultaría familiar, Darniche estaba furioso porque una mujer arruinara su automóvil. Terminó séptima, el mejor lugar de todos los Lancias en competición. Y Darniche probablemente recordó sus palabras con amargura en septiembre, cuando Mouton peleó con él por primera vez, hasta que arruinó su Lancia Stratos, sobrecalentando el motor.

AÑO CON "QUATTRO"
Entonces, vino una llamada telefónica. El jefe del equipo de trabajo de Audi le ofrece un contrato para la próxima temporada en su nuevo Quattro. La bestia de 300 caballos de fuerza con tracción a las cuatro ruedas, algo que no se había visto jamás antes en el mundo del rally. Firmó para un año y con otro comentario chovinista para que Michele se convirtiera en pionera también. Después de que el legendario piloto de rallyes Ari Vatanen dijera en 1981:
"Nunca puedo ni voy a perder con una mujer"... Michèle ganó su primer evento WRC en Sanremo, convirtiéndose en la primera mujer, (y única), en conseguir ganar una prueba del Mundial de Rallyes. 1982 fue duro para Mouton.
Durante el rally Costa de Marfil, supo que su padre murió, pero mantuvo su último deseo de seguir en competición y hacer todo lo posible. Y si no hubiera sido por un choque a 600 km antes del final de la prueba, podría haber ganado, lo que abriría su camino al campeonato del Mundo de pilotos. Ese año habia ganado tres pruebas del calendario, Portugal, Acrópolis y Brasil, también sentada al volante del Quattro en dura pugna con Walter Rohrl y su opel Ascona. Al final, Walter Röhrl ganó y se convirtió en el primer piloto del WRC en ganar dos títulos consecutivos.

LOS MONSTRUOS VIENEN...
A partir de 1983, el Grupo B se convirtió en la parte más loca y legendaria de la historia del WRC. Las reglas de homologación perdidas trajeron niveles locos de potencia, (en exceso de 400 Y 500 CV), y una velocidad sin precedentes hasta ese momento. Como dijo Juha Kankkunen: "WRC es para niños, Grupo B era para hombres". Y... una mujer, debemos agregar. Detrás del volante de los monstruosos Quattros, se convirtió en una de las pocas personas capaces de controlar el automóvil a velocidades increíbles entre multitudes de fanáticos enloquecidos. Y lo hizo bastante, muy bien, en esta ocasión, también. Sin embargo, no todo se trataba de rallyes.

En 1984, Mouton llevó un Audi Quattro a Pikes Peak en Colorado, siendo el más rápido de su clase.
Al año siguiente, 1985, ganó en la general, poniendo fin al reinado de los prototipos V8 estadounidenses. Cuando el legendario piloto estadounidense Al Unser llegó con comentarios machistas, ella respondió:
"¡Si tienes las pelotas, puedes tratar de volver a correr contra mí también!".

Para 1986, Michele encontró un asiento en el equipo Peugeot, conduciendo el nuevo y aún más rápido Peugeot 205 Turbo16. El pequeño automóvil francés le permitió conquistar el Campeonato Alemán de Rally. Ganadora de seis de los ocho eventos, Mouton se convirtió en la primera mujer en ganar un gran campeonato de rally. Al final, fue una vez más el Tour de Corse lo que lo cambió todo. Después del trágico accidente de Henri Toivonen junto a su copiloto Sergio Cresto, Michele Mouton decidió que si el Grupo B iba a terminar, también se acabaría su carrera en los rallys. Y, como sabemos, así fue... y según dicen, en una ocasión comentó:
"Para conducir bicicletas, me quedo en casa"...
GRANDE MICHÈLE !!!!

Pero no fue el final definitivo de su aventura con los rallyes. Hoy, Michele Mouton es gerente de la FIA en el Campeonato Mundial de Rally, supervisando el mundo que una vez tomó por asalto, una hazaña que ninguna mujer ha repetido desde entonces.

Referente a Pikes Peak 1985... un poco de su vivencia:
Entrevista de Carl McKellar el 8-Junio-2013

Primero, el coche "Era mi coche del mundial de rally, el Audi Sport S1, (también llamado Sport Quattro), de grupo B, (no el de los alerones, el anterior modelo. El de los alerones como muchas veces hemos comentado aquí es el S1 E2 ó E2), con bastantes modificaciones. Trabajamos mucho en el trabajo del motor en altitud y en el sistema eléctrico. Tenía 600 caballos de potencia al freno, solo 70 más que mi coche 'normal' de rally, lo cual no era demasiado. Mi caja de cambios era manual. Era lo que había, así que no tenía más remedio que aceptarlo".
Y después la carrera "Era sobre gravilla suave, al aire libre. Empezabas a 1.500 metros sobre el nivel del mar, en un bosque, y llegabas a alcanzar casi los 4.500 metros en menos de 20 kilómetros. Todo eso en 12 minutos, era como... ¡chiiuuuuun!".

Una vez, conduje con todas esas nubes alrededor y algunos de los conductores que llevaban coches descapotables tenían que ponerse máscaras de oxígeno. A mí, la altitud no me parecía un problema. "En grava, incluso con 1.000 caballos de potencia, el coche puede deslizarse y tienes que tener cuidado. Pero ahora que es todo asfalto... con neumáticos lisos y 875 caballos... lo mejor es desear buena suerte, (en referencia a Sebastien Loeb).
¿Qué me dices de los bajones? "Esto es un desafío. No tienes que venirte abajo... ¡Tienes que seguir en la carretera!.
En la cima, tienes cuatro curvas en las que vas a tope, excepto en la segunda. Yo estaba muy motivada y decidí no dejarme caer. Sentía como si el coche estuviera tirando de mí y pensaba: 'Mierda, voy a llegar hasta ahí'. Te lo digo en serio, te sientes tan cerca de... Tenía ese sentimiento de estar justo ahí, y los sentimientos son muy fuertes, creo".

No te metas con Mouton...
"Los organizadores me hicieron la vida imposible. Era como si fuera la primera vez que veían un coche de rally o un coche con turbo... o la primera vez que vieran a una europea, ¡o a una mujer!". "Me pararon por exceso de velocidad al principio del entrenamiento, por 8 km/h, y me pusieron delante de un pequeño tribunal donde me decían que era como una criminal porque había superado la velocidad permitida y podía haber matado a sus hijos". "Me multaron y me prohibieron empezar la prueba. Yo me hubiera metido, me hubiera puesto los arneses y habría salido. Sabían que no tenía casi tiempo para entrenar y no querían que ganara, así que encontraron algo que creían que impediría que lo hiciera". Yo estaba tan convencida que decía: "Os lo voy a demostrar, incluso en esta situación". "Así que lo pensamos y decidimos decirles que íbamos a hablar con la prensa a la hora del desayuno a la mañana siguiente. Les dije: "Puedo demostraros que incluso a 30 km/h más rápido puedo frenar a tiempo el coche para no atropellar a un niño. Además, ni siquiera estáis pensando en mi propia seguridad cuando esperais que haga una montaña como esta. ¡Estáis locos!". Se dieron cuenta y dijeron: "Ah, la seguridad". Así que al final me permitieron arrancar el coche, aunque los mecánicos tuvieron que empujarme hasta la línea de salida y no podía poner una marcha hasta que empezara a correr el reloj. Yo estaba tan convencida que decía: "Os lo voy a demostrar, incluso en esta situación". ¿Las cuatro curvas de la cima? Las cogí todas a saco. Me hice con un nuevo récord en la carrera, otra victoria y cabreé a algún que otro americano payaso.

En 2000, participó en la carrera London Sydney Marathon, conduciendo un Porsche 911, teniendo como navegante al ganador de la misma carrera en 1993, Francis Tuthill,y acabando detrás de su ex-compañero Stig Blomqvist.

Texto información de www.skoda-motorsport.com, traducido al español, (añadiendo alguna cosita), por MUNDO RALLY RETRO (GrupoB)
La entrevista de la subida Pikes Peak es de Carl McKellar el 8-Junio-2013.

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Palabras clave:Historia / Michele_Mouton / Personajes
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Fecha añadida:07 Marzo 2021
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14 / SEP / 2013 19:00
 

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